Aquí venimos nuevamente, a daros cuenta de cómo fue nuestro último taller. En esta ocasión nos atrevimos a lidiar con el telar circular. Nuevamente, con el aforo completo, nos dispusimos a disfrutar de un rico desayuno, mientras tejíamos. Así tejía, así, así...
La verdad es que es una forma relativamente sencilla de tejer, y si las agujas o el ganchillo te resultan difíciles, en el telar circular puedes encontrar un aliado perfecto para tejer diferentes proyectos que, la verdad, quedan muy lucidos.
Comenzamos por intentar tejer una cinta cruzada de pelo (una forma original de llevar las orejas calentitas) y la verdad es que el ambiente fue de suma concentración intentado llevar en mente los puntos derechos y revés. Damos fe, de que alguna asistente se ha pasado tejiendo el fin de semana y sus labores le han quedado preciosas.
Y, ¡cómo no! nuevamente dar las gracias al Kafe Botanika, por permitirnos utilizar su encantador espacio para tejer nuestros proyectos, mientras degustábamos los riquísimos bizcochos de chocolate y limón.
Recordad, que marzo está a la vuelta de la esquina, y en breve, volvemos con otra propuesta para disfrutar y dejar fluir nuestra creatividad.
Un saludo y hasta pronto!!